sábado, 7 de noviembre de 2015

SEXY!

  
¡Hola guerreras!

Hombres FUERA por favor. A ver ése que se está escondiendo, te estoy hablando a ti, ¡hasta luegooooooo!¡pshhhhh!... ¿Ya está? ¿Ya estamos solas? Entonces ya puedo escribiros.

Cuando pensamos en una mujer sexy, se nos viene a la mente la buenorra del gimnasio, la que baila moviendo el culo del video de los leggins , o la toplesera tanguera que se nos sienta justo al lado un domingo de playa romántico. Sí, ésas descoyuntacuellos de hombres, que les hacen ladrar, rebuznar y gruñir (mentalmente).  Y en medio de toda la película estamos nosotras con nuestras ojeras y barriga hinchada, deseando desaparecer, no por la situación en sí, sino porque en ese momento estamos teniendo un viaje de los que nos dejan sin aire.

 Ay Lenina, ¿y a mi qué más me da ser sexy?¿no ves que no estoy pa na ahora mismo? Y si se produjera el milagro, y un pepino intentara seducirme tendría que decirle que no …

Chicas, pues sí que nos da. Porque somos endoguerreras, y eso no quiere decir que seamos angelitas. Somos traviesas, somos juguetonas, y además somos malas.  Malas porque queremos fulminar hombres sólo por el placer de sentirnos irresistibles. Y más malas porque, a diferencia de las buenorras, no somos trozos de carne de una noche, nuestros efectos son PERMANENTES en su cándido e inocente corazón. A nosotras no se nos puede olvidar.

¿Cómo ser sexy con endometriosis? Como he dicho en otras entradas, nuestra personalidad de endoguerreras ya es un punto a nuestro favor, porque somos frágiles por fuera y fuertes por dentro. Sólo faltan un par de retoques exteriores más y ¡ya está!. La endometriosis, como siempre, no nos lo pone fácil, pero eso no significa que no tengamos una salida.

1.           Cuida tu ropa exterior

¡Qué difícil! ¿Cómo podemos ir guapas cuando TODO, absolutamente todo nos aprieta la barriga y nos duele?  Nada de vaqueros apretados, nada de leggings, nada de shorts, nada de faldas de tubo, nada de cinturones…
No vamos a ir denudas por ahí ¡eso sí que sería sexy! (creédme que en los momentos de dolor me ha parecido hasta viable). Lo de ir de abuela con 20 – 30 años como que tampoco…
Sin embargo, todavía nos quedan las prendas más dulces: las faldas y vestiditos, sujetos a la cintura, que dejen libre la zona pélvica. ¿Acaso hay algo más sexy que una falda?. Sí, corta (lo siento Mamá), porque podemos combinarlas con medias y leotardos chulos. Si las medias os aprietan podéis comprároslas más grandes y hacerle un cortecito en la gomilla, pegándo los bordes con un poco de cola, para que no se deshilachen.
A mi me gustan mucho las de patinadora, porque aunque son faldas son muy informales, combinan con todo: jerseys de encaje serios e incluso con sudaderas. En bershka hay una colección de faldas de este estilo,lisas, estampadas y de muchos colores por 10E (tampoco podemos gastar mucho, que tenemos que ahorrar para el médico), pero estoy segura de que también las hay en otras tiendas. Me he comprado unas cuantas así:

Chicas, sé que no es tan fácil. Yo siempre fui de vaqueros. El día en que mi cuerpo no pudo más y tuve que cambiar de ropa lloré muchísimo, en medio del centro comercial, con las manos llenas de bolsas. Pero poco a poco voy encontrando mi estilo, y mi querido Florian dice que estoy más guapa J.

2.      Cuida tu cuerpo

Esto merece una entrada a parte. Luchemos para que la fofez no nos invada. ¿Pero qué ejercicio vamos a hacer, si no podemos movernos del sofá?. Con mucho cuidado y mientras no nos duela más de lo normal, podemos hacer ejercicios que no impliquen impactos, y no compriman la  barriga:
-          La elíptica: A mi la bici estática me duele, pero la elíptica no. Mientras no la pongamos muy fuerte, podemos echar ahí unos veinte minutos quemando el pastel del otro día.
-          Yoga y Pilates: Muy recomendables, además de ponernos un poco fuertes, mejoran nuestro equilibrio, nos relajan y nos enseñan a respirar. Esos ejercicios de respiración los podemos aplicar cuando lleguen las crisis de dolor.
-          Danza del vientre: No la he probado, pero algunas enfermas dicen que les va muy bien. Porque es divertida, sexy, estimula el flujo sanguíneo pélvico y masajea los ovarios.

Chicas, no importa que seamos las más torpes del gimnasio, no importa que el ejercicio sea tan flojo que casi no nos sirva Hacer un poco siempre es mejor que no hacer nada

3.      Cuida tu piel

Importantísimo para las endoguerreras, porque los tratamientos hormonales son una pesadilla para la piel. Según la pastilla del día, o se nos pone grasa y llena de granos, o se nos desescama de lo seca que está.  Además, tener la piel hidratada ayuda a prevenir las estrías, que también nos pueden aparecer debido al tratamiento
Yo sólo uso crema de aloe vera del Mercadona. Haciendo hincapié en el pecho. Pero soy una ignorante del mundo de las cremas, seguro que vosotras encontráis un tratamiento óptimo para cada día..

4.      Cuida tu ropa interior

¡Bufff! La ropa interior es un trauma, porque las enfermas de endometriosis somos muy propensas a infecciones y todo nos duele. Con las bragas pasa esto, que el dolor es inversamente proporcional a la cantidad de tela que tenga la braga.
Traduzco: si la braga es de abuela, estamos cómodas, si es un tanga de hilo, muerte segura. Incluso las brasileñas que tanto se llevan ahora nos duelen. De hecho, en un mundo ideal, llevaríamos las bragas esas de algodón con agujeritos y toallita ancha de cuando éramos casi adolescentes. Sí, esas que casi crecieron con nosotras, y que les había salido un agujero en el lado, pero bueno, no importa aún no se nota mucho…
¡Noooooooooo!
¡No, No No! Guerreras, no hay nada menos sexy que una ropa interior fea. ¡Si queremos que huyan es la técnica más efectiva! ¡Unas bragas bonitas son imprescindibles!
Así que chicas, por favor, esto no:

Esperad, que Florian me dice que las bragas de muñequitos del women’s secret tampoco.
¿Entonces esto tampoco?

¡Aiiiinnnssss si era justo lo que yo estaba pensando!
Nos queda una solución más: En Intimissimi ahora venden unos packs de 3 bragas por 23E. Son maravillosas!!! Delicadísimas. Muchas tienen la costura detrás y favorecen muchísimo el culete. Y la buena noticia es que siguen teniendo la toallita ancha debajo, y no duelen.


Guerreras,¡con estas bragas los dejamos ko y seguimos estando cómodas!

5.      Cuida tu olor

Ésta es muy fácil, sólo necesitamos lavarnos y ponernos colonias y perfumes. Perfumes fresquitos, sutiles, de los que no apestan el ascensor cuando nos hayamos ido. Que sólo lo huelan si se acercan un poco a nosotras. Así querrán acercarse de nuevo.
Pero vamos un poco más allá. ¿Qué tal si nos ponemos perfume también para dormir? Así no hay quien se nos resista!

6.      Cuida tus adornos

Son como los quesitos de la trampas para ratones. No hace falta que sean grandes y vistosos, basta con que sean pequeños, un poco brillantes. Una diadema, un anillito dorado en unas manos arregladas...
Se rallan, se vuelven locos, no pueden evitar no fijarse. “¿qué lleva ahí que brilla? ¿ y por qué lo lleva si no sirve pa na?¿y por qué? ¿y por qué? ¿y por qué?”. Ahora las tiendas de ropa venden los cartoncitos con muchos anillos, pendientes, y pulseras por 5 o 6 E que nos pueden servir. 


7.      Cuida tu ropa de estar por casa

Porque las endoguerreras tenemos que estar mucho allí. Al menos estar guapa.  Cada una ya con su estilo, podemos ir en chandal de Decatlon, o podemos ir disfrazadas de peluche tipo Oisho. Pero, chicas, elijamos lo que elijamos, esto no por favor

QUÉ HORROOORRR! ¿habéis visto al fulano? ¿en serio la gente compra esto? ¡ Es que la que sale huyendo soy yo!!!

En fin, podría estar hablando de esto durante horas. ¿tenéis más trucos vosotras?. Recordad, somos mujeres, somos endoguerreras, merecemos respeto y admiración, no somos carnaza de usar y tirar, por mucho que se empeñen en hacérnoslo creer. No nos hace falta hacernos fotos con morritos y las domingas al aire. Con nuestro propio encanto y un par de detalles podemos fulminar a quien queramos... y para siempre. Las que estáis solteras, sed implacables con todos los que os encontréis. Las que no lo estamos, será nuestro amado quien sufra nuestro instinto cazador. Aunque chicas, confieso que cuando lo veo caer en las trampas una y otra vez, es a mí a quien se le derrite el alma…

¡Os quiero mucho guerreras!                             



5 comentarios:

  1. Aunque has echado a los hombres, yo me he quedado en plan "voyeur" y en este tema tendría mucho que decir, pero....las mamás acechan.
    La verdad es que eres muy divertida escribiendo. Sigo pensando que esa cosa rara que tú tienes se ha inventado para que escribas. Tus fans nos habríamos perdido todo eso que llevas dentro de no haber sido por la bendita endometriosis cabrona.
    Sí, en este tema las mamás deben quedar lejos. Son tan aficionadas a las bragas de la abuela que a veces uno piensa que se llevan comisión.
    Consejo de hombre: Las mujeres que triunfan no son las más buenorras, esas sólo producen esguinces de cuello, las que dejan fijo el cuello en un punto sin capacidad de reacción son las inteligentes que saben sacar partido a sus encantos. Aunque las mujeres no lo creáis, los hombres vemos más cosas de las que suponéis.
    No lo dejes Lenina, ya verás como esto se te llena de fans....y que el que tienes a tu lado ande con cuidado porque las letras bien puestas tienen un poder mucho mayor que otras cosas que saltan más a la vista.

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    1. Bueeeeno permitimos que estés a cambio de consejos masculinos que nos ayuden a ser más irresistibles todavía! Gracias por animarme a escribir, aunque sea novata, me encanta. ¡¡¡Es muy muy adictivo!!!

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  2. Oleee me encanta esta entrada!!! siempre sexy baby ;)

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    1. Muchas graciiiiiaaaaaas!!! Antes muerta que sencilla jejeje

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  3. No te echaré muchas flores para que no te duermas en los laureles y sigas deleitándonos con las historias del "Endometrio asesino"
    ¡Qué cosas tan raras tenéis las mujeres! con lo cómoda que es una próstata.

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